Palabras de hierbas y flores, resuena el campo con susográfica voz, y el viento teje melodías entre sueños de luz y de amor. Cada río es un corriente que cuanta historias sin tregua, y el cielo, en su espejo azul, es el eco de lo que espero.

Reír con el alba nueva, llorar con la luna y el mar, e infinitas son las estrellas que en el célebre plano están.

  • Ángel de Saavedra Duque de Rivas